rumiar la biblioteca

lunes, 22 de diciembre de 2025

Rebeca García Nieto: culpa colectiva, psicoanálisis, arte

 

Rebeca García Nieto, El color y la herida, Madrid, De Conatus (2025)

https://deconatus.com/libros/el-color-y-la-herida/

Leemos aquí la historia de un reconocido pintor alemán, Rüdiger Keller, superviviente de la Segunda Guerra Mundial y la RDA, que ha pintado un cuadro por el que muchos lo acusan de pederastia. Así arranca la historia, que es también la historia de Alemania y, aunque a primera vista parezca descabellado, la historia de Nabokov (¿acaso Keller es un trasunto del autor de Lolita?). Recordemos que la autora es psicóloga y por momentos juega a aquello de psicoanalizar la sociedad, el arte: todo artista puede que esconda su punto ciego, aquello que no quiere ver, ese rincón oscuro repleto de trapos viejos, en medio de un cuadro. Seguir la vida de Keller para descubrir cómo es que terminan acusándolo de tendencias pederastas resulta fascinante. Porque leemos sobre innumerables asuntos que se resuleven con soluciones ambiguas y hasta contradictorias (¿verdad que el arte tenía que plantar más preguntas que respuestas?) y aprendemos mucho sobre cómo Alemania sobrelleva la culpa de la guerra y el Holocausto.

"Las sociedades basadas en la culpa lo fían todo a la conciencia individual, a esa voz interior que nos dice 'Eso no está bien'. Su noción clave, lo han adivinado, es el pecado. Y después del pecado, ¿qué viene? La expiación, el arrepentimiento, el perdón. Seguro que les suena. / Las culturas que se basan en la vergüenza, en cambio, no dependen tanto de la conciencia de cada uno, sino de la opinión de los demás, de la comunidad, del grupo. Aquí entraría también la llamada opinión pública. En estas sociedades, los individuos que obran mal se enfrentan al oprobio. / En las primeras, por tanto, la represión viene de uno mismo; en las segundas, el control es externo. En los dos casos se trata de mantener a la gente a raya, aunque difieren en la forma de conseguirlo."

Lo llamativo es que Rebeca García Nieto ha construido esta novela usando un estilo muy cercano a los posmodernos norteamericanos (pienso sobre todo en Gaddis: diálogos y diálogos, anuncios intercalados), y la estructura, salpicada de cartas por aquí y por allá, me recordaba a aquellas novelas de Bellow. La misma sensación que tengo con Eduardo Lago: pareciera que estamos leyendo una traducción de un muy buen escritor norteamericano. 

lunes, 3 de noviembre de 2025

Jordi Esteva: viajero, desierto, mar

Jordi Esteva, Los árabes del mar, Barcelona, Galaxia Gutenberg (2025)

https://www.galaxiagutenberg.com/producto/los-arabes-del-mar/

Leo este libro por trabajo en pleno verano, con las siestas obligatorias, y la inmersión en la lectura es aún más envolvente. Los árabes del mar, bellísimo y sobre todo entretenido libro de viajes, donde abundan genios, desiertos, cigarrillos de todo tipo y mucho café. Jordi Esteve no solo es un viajero empedernido, de impulso nómada, sino que es un gran narrador: describe con exquisita precisión esos paisajes y encima intercala historias, a la manera de Las mil y una noches, a lo antropólogo oral; un mundo sumamente masculino, por cierto. 

Es evidente que Esteva sabe pensar con imágenes: sirva como ejemplo cualquiera de sus documentales. Este libro en concreto es la historia de un viaje a Sudán, Yemen, Omán, Kenia, Zanzíbar y las costumbres del Índico, de los marineros del Índico, y entonces te das cuenta de cuánta influencia y mezcla hay de Arabia y África y la India en todas sus costas. Tal vez Esteva es capaz de mirar a lo Werner Herzog, al menos eso pienso cuando miro sus películas, cuando leo sus libros. 

"Proseguimos por un desierto de guijarros sin ninguna perspectiva, bajo un sol blanco sin sombras hasta que, como en un espejismo, surgió de la nada un enjambre de monstruosas aves de hierro, envueltas en una nube de arena, que taladraban la tierra con incansables picos de acero. Eran perforadoras de petróleo. No muy lejos de aquel lugar, aquel mar de piedra daba paso al desierto de Rub al Jali.

¿Por qué siempre me atrajeron tanto esos parajes extremos, de calor sofocante, inundados de luz como en una fotografía sobreexpuesta, en los que parecía dormirse nuestro lado más racional mientras se agudizaban los sentidos? Lugares donde me invadía una sensación de paz y donde el tiempo corría de otra forma, en los que me parecía ya haber estado antes y donde lo inesperado podía ocurrir."


lunes, 13 de octubre de 2025

Luis Noriega, el cuento del umbral

 

Luis Noriega, La puerta de la felicidad, Barcelona, Comba (2025)

https://editorialcomba.com/libros/narrativa/la-puerta-de-la-felicidad/

Un guionista colombiano que vive en Barcelona viaja a Bogotá para hacer una película; Abraham nos presenta una variación del sacrificio de su propio hijo; una pareja tiene la mala suerte de que su teléfono nuevo corresponda al de un antiguo restaurante; dos niñas veganas tienen conversaciones perversas sobre sus familiares pero estos solo ven que están jugando; un burócrata llega a la frontera para asegurar que del otro lado son tan humanos como los de este lado; un hombre recibe la llamada de un desconocido que le asegura que crearon una máquina capaz de cambiar de identidad; un joven se enamora de una chica que parece que es precisamente la preferida del profesor a cuyo club de alumnos admiradores asiste; una narradora recibe el rechazo de una editorial porque su texto no es "realismo emocional" ni "crónica íntima"; un escritor de relatos eróticos por encargo escribe mientras cuida a su hija; un crítico de videojuegos describe un juego que en una de sus versiones se parece siniestramente a la vida cotidiana en el mundo hipercapitalista; la historia de una foto que puede que tenga la capacidad de otorgar felicidad.

Identidad, inmigración, reconciliación con el país de origen; algo de ciencia ficción o narrativa de anticipación y nuevas tecnologías; amor, vida de parejas, hijos; realismo y fantasía. La puerta de la felicidad nos presenta historias que parecen encontrarse en la frontera: la realidad se rasga y accedemos a otras variaciones posibles donde las leyes lógicas pueden ser distintas. Todo contado con una prosa fluida y cercana, cuando no parodia otros discursos que vienen a cuento al argumento de la historia, y con una notable maestría para los giros inesperados. Es capaz de hacerte pensar que el cuento va de una cosa y en realidad termina yendo de otra.

 "Cuando decimos que la Franja es la frontera misma de la civilización no estamos citando una frase vacía, como piensan ustedes los burócratas. No. Estamos diciendo una verdad literal. La civilización terminó ahí, en la garita de la entrada. Es por eso que, fuera de la Franja, la Franja no existe." ("La Franja")

lunes, 29 de septiembre de 2025

Cristina Rivera Garza o narrar lo inenarrable

 

Cristina Rivera Garza, El invencible verano de Liliana, Barcelona, Literatura Random House (2021)

https://www.penguinlibros.com/es/libro-de-biografias/246022-libro-el-invencible-verano-de-liliana-9788439739456?srsltid=AfmBOooD-LM3_zk6Y1YjTWB7aGLGEDl4WoymEAiQ18MhCh9Fp_kiPZ8Y

No son de mi preferencia los libros que narran las calamidades personales del autor. No he leído ni La hora violeta de Sergio del Molino ni Nela 1979 de Juan Trejo, por poner dos ejemplos cercanos en el tiempo, por esas mismas razones, ni tampoco libros que tratan sobre enfermedades (aunque hayan sido superadas con éxito) o depresiones severas, un tema recurrente de la literatura actual. No me da placer la enfermedad ni la desgracia ajena. Solo recuerdo un libro maravilloso que sí fui capaz de disfrutar, y eso porque el autor consiguió narrar sus desventuras con un desternillante humor negro: Viaje alrededor de mi cráneo de Frigyes Karinthy. Pero el humor no suele ser parte del cóctel en estos casos. Y yo tengo una marcada predilección por el humor como recurso literario.

Sin embargo, no quería dejar de leer este desgarrador libro de Rivera Garza, autora que admiro profundamente. Y aunque no me pareció el mejor de sus libros, la autora ha podido construir una historia a su manera, es decir, usando archivo, levantando un texto con voces ajenas sobre aquello que en principio parece inenarrable: el asesinato de su hermana con apenas veinte años a manos de su exnovio. Claro que el libro actúa como denuncia, porque el caso de Liliana no es, desgraciadamente, un caso aislado. Y creo que en este sentido el libro funciona como bandera de una causa necesaria, una causa que desde hace poco cuenta con su propio vocabulario. Con su definición específica. Algo que Latinoamérica necesita y debe gritar: basta ya de feminicidios.

"El feminicidio no se tipificó en México sino hasta el 14 de junio de 2012, cuando el Código Penal Federal lo incorporó como un delito: 'Artículo 325: Comete el delito de feminicidio quien prive de la vida a una mujer por razones de género'. A gran parte de los feminicidios que se cometieron antes de esa fecha se les llamó crímenes de pasión. Se le llamó andaba en malos pasos. Se le llamó ¿para qué se viste así? Se le llamó una mujer siempre tiene que darse su lugar. Se le llamó algo debió haber hecho para acabar de esta forma. Se le llamó sus padres la descuidaron. Se le llamó la chica que tomó una mala decisión. Se le llamó, incluso, se lo merecía. La falta de lenguaje es apabullante. La falta de lenguaje nos maniata, nos sofoca, nos estrangula, nos dispara, nos desuella, nos cercena, nos condena."

lunes, 15 de septiembre de 2025

Mark Fisher sobre el miedo y el cinismo (cita)

 

Mark Fisher, Realismo capitalista (2009), traducción de Claudio Iglesias, Buenos Aires, Caja Negra (2016)

https://cajanegraeditora.com.ar/libros/realismo-capitalista/

"[...] el cinismo y el miedo son los afectos preponderantes en el capitalismo tardío. Estas emociones no incentivan el pensamiento valiente o los saltos esperanzados, sino la conformidad y el culto de la variación mínima, la distribución de contenidos que se parecen muy de cerca a los que ya han sido probados exitosos."

lunes, 1 de septiembre de 2025

Gustavo Faverón Patriau o quién se atreve a reseñar al monstruo

 

Gustavo Faverón Patriau, Minimosca, Avinyonet del Penedès, Candaya (2024)

https://candaya.es/libro/minimosca/

Claro que no hace falta que escriba absolutamente nada sobre Minimosca, la desquiciada novela que se desborda. Pero imposible no dejar constancia de tremenda lectura abrumada: por momentos creer que nos toma el pelo (qué obedientes, lectores pacientes leyendo broma tras broma), por momentos aburridos, por momentos riendo a carcajadas, por otros maravillados, quiero decir, ese prosismo que se gasta y que se lee deslizante, exuberante, como la explosión de la primavera, como ese instante en que lo que florece lo hace a tal velocidad que está a punto de pudrirse (pero no, aún no). Difícil ese equilibrio de la desmesura, pero vale la pena porque hay páginas realmente brillantes. 

Minimosca es muchos libros, sin duda, y es un libro de desdoblamientos constantes, de reescritura de la escritura siempre alucinada. Hay versiones de las mismas historias contadas desde distintos personajes, hay distintos personajes con idénticas historias de vida, hay la temática persistente del mal, del horror, de la contradicción de creer estar haciendo algo bueno cuando en realidad es tan malo como lo peor, la fatalidad de la herencia, el conflicto entre padres e hijos, el absurdo de la vida. No voy a resumir la trama porque difícilmente me la acuerde. 

Leí la novela en vacaciones (necesitaba unos cuantos días libres para la tarea). Pero salí de allí con la satisfacción de haber atravesado una novela-selva intrincada, novela de ambición desorbitada, una novela-experiencia de lectura más que novela-argumento. Salí de allí (sobreviví) volviendo a creer que la literatura sigue viva. Aunque confieso que hubo un momento en que estuve a punto de claudicar, pero entonces llegó la parte "Momias" y ya no pude soltarla. 

Y ya está, no diré nada más (hay infinidad de buenas reseñas). Solo aviso que si os desanimáis no dejéis de leer las páginas 456-462 porque es una de las mejores explicaciones de la función de autor en la narrativa. Dejo aquí un fragmento: